El tiempo vuelta y los bebés se hacen grandes, Lucía tenia meses cuando me mude a Italia, recuerdo despedirme de ella con tristeza cuando tome el vuelo, por que sabía que de ella me perdería tantos momentos importantes, que nuestra relación no sería tan estrecha por que no estaría físicamente presente en sus primeros descubrimientos del mundo, como los estuve con su hermano.
Hace algunos meses fue su confirmación y me pidió que fuera su Madrina, se que no era yo la que quizás ella anhelara más, ya que en realidad ella formó una relación más estrecha con mi cuñada que falleció hace ya tres años.
Tome su petición con muchos sentimientos encontrados y también realicé su vestido para su primera comunión. Parecia algo lógico que fuera así, pero para mí fue algo especial que ella supiera que su tía estaba diseñando su vestido sorpresa.
Una navidad antes en un brindis comento que mi trabajo la inspiraba y eso me dio mucha Alegría, saber que a pesar que nunca estuve presente de algún modo estoy presente para ella.
Nunca antes había realizado un vestido para una primera comunión y debo decir que fue algo bello y ratificante poder verla en día tan especial como su primera comunión.
Les comparto algunas fotos del vestido.
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